Hay muchos factores de suma importancia que sostienen una sana relación de pareja, y entre ellos, hoy toca hablar de la sexualidad e intimidad en la relación; y cómo podemos mantener esa chispa encendida.
Este aspecto de la relación es un reto de ambos en el día a día; y es verdad que puede haber situaciones estresantes, que afectan y muchas veces se salen de control, como la pérdida de un trabajo, la depresión o ansiedad de uno de los miembros de la pareja, vivir un duelo, enfermedades, entre otras; sin embargo, de no ser así, es necesario identificar qué es lo que está pasando si la relación ha empezado a enfriarse, o hay un distanciamiento.
También es cierto, que al pasar de los años, la relación va sufriendo cambios naturales, se pasa por diferentes fases, y quizás con el tiempo, ya no es la misma llama que ardía en ambos cuando empezaron la travesía, pero se ha ganado en madurez, serenidad, respeto, mayor intimidad y confianza o compasión y empatía de ambas partes; y siguen eligiéndose cada día el uno al otro.
¿Porque nos distanciamos? ¿cuándo dejamos de mirarnos?
Esta es una frase que escucho a menudo, en el trabajo con parejas. Puede que uno sea más consciente que el otro de la razón del enfriamiento en la intimidad de la pareja, e intimidad sexual, pero muchas veces no lo dicen, o la comunicación carece de un dialogo sano, donde ambos puedan sentirse libre de expresar sus emociones al respecto. Hace tiempo que no cruzan una mirada llena de amor, ternura y ¡deseo!
Algunos de estos factores que dañan la intimidad sexual:
- Un dialogo hostil o alterado.
- La rutina
- La distancia física o afectiva
- Falta de empatía del uno al otro
- Falta de comprensión, admiración y respeto
- Criticas constantes, reproches, ironías
- Falta de detalles por ambas partes
- Las emociones no se gestionan bien y se causan daño
- Creencias de cada uno respecto a la sexualidad en el matrimonio
- O puede ser un tema hormonal, en cuyo caso hay que ir al especialista
Otros factores, que se salen del control de ambos, pueden ser:
- La enfermedad de un miembro de la pareja
- La pérdida de un ser querido
- Un diagnostico inesperado, etc.
Secretos para mantener la chispa
- Pasar tiempo a solas. Procurad al menos un día en la semana sacar un tiempo para hacer algo juntos; tomar un café, pasear por el parque, montar en bici, ¡andar…Hay muchas cosas que podéis hacer a solas!
- Reconoce si has dañado a tu pareja, con algún gesto, palabra, o con silencio quizás, y pídele perdón, eso es sanador para avivar la llama y el deseo de estar juntos.
- Los detalles. No solo regalos. Sorpréndele con un abrazo que no espere, mírale a los ojos, y procura su mirada, y dile que significa en tu vida, no esperes un día especial para celebrar, hablen de cosas que antes les encendía esa pasión… etc.
- Mantén el contacto físico con tu pareja, las relaciones sexuales en el matrimonio, es un aspecto fundamental para equilibrar la relación. Pueden tener mucha confianza, compañerismo y empatía, pero si no hay esta parte sexual, solo es eso, una convivencia de compañeros. ¡Disfrútense! Mantengan la higiene y limpieza corporal, es importante para atraerse mutuamente.
- Cuidar la forma de hablarse mutuamente, es muy gratificante para la relación. Hablarse desde el respeto, consideración y amor que ambos merecen.
Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazo; Porque fuerte es como la muerte el amor; Duros como el Seol los celos; Sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama. Cantares 8:6
Karla Mayorga
Psicóloga y Coach Familiar y de Pareja.
Contáctame: mayorgakar76@gmail.com