La industria de la impresión, que supuso una auténtica revolución cultural a su nacimiento, cuenta ya con una historia de más de 500 años a sus espaldas, y ha evolucionado muy rápidamente en las últimas décadas. La aparición de plataformas de impresión online, ha optimizado el acceso a estos servicios, reduciendo sus costes y aprovechando las ventajas de las nuevas tecnologías.
El cambio más relevante, además de la modernización de muchos procesos técnicos, es la conciencia cada vez más extendida de la necesidad de limitar la huella ecológica que genera esta actividad.
Ahorro de agua
La maquinaria de última generación ahorra agua en los procesos de impresión teniendo que ser sustituida muy pocas veces. Consiguiendo un ahorro sustancial de agua, se abarata el proceso de impresión y se limita su impacto medioambiental.
Materiales ecológicos
El uso de pliegos de papel ecológico de procedencia certificada FSC y tintas de base vegetal ayudan a crear un proceso de producción menos dañino para el medio ambiente y más sostenible en general ya que la procedencia de estos materiales está controlada. Tanto en los procesos de obtención como de fabricación se omiten procesos químicos dañinos para el ecosistema.
Reciclado
Es crucial reaprovechar y reciclar tanto el papel sobrante como los productos químicos residuales que genera la actividad impresora.
Tintas ecológicas
Las tintas vegetales ecológicas presentan una composición similar a la de las tintas tradicionales. Pero con una diferencia importante: los aceites minerales son sustituidos en su mayor parte por aceites vegetales. Estas tintas permiten reducir de forma significativa la producción de compuestos orgánicos volátiles (COV), que son una fuente de contaminación resultante del uso de tintas de imprenta tradicionales.
Además, al no haber aceites minerales, el solvente necesario al empleo de las tintas presenta un nivel de toxicidad mínimo, y procede de recursos renovables en un 80/85 %. Así se reduce la utilización de recursos minerales petroquímicos.

Papel libre de cloro (TCF)
Fabricado con fibra virgen para el que, en el proceso de blanqueo de la pasta, se utilizan alternativas al cloro como el oxígeno o el ozono. Este tipo de papel se denomina “totalmente libre de cloro” (TCF, Totally Chlorine Free).
Papel ecológico
En su proceso de fabricación se han tomado las medidas necesarias para evitar el impacto ambiental. Los criterios que marcan si un papel puede considerarse ecológico están basados en el impacto ambiental del ciclo de vida del producto que contempla un análisis del uso y consumo de:
los recursos naturales y de la energía de las emisiones al aire, agua y suelo
de la eliminación de los residuos y la producción de ruidos y olores durante la extracción de las materias primas de la producción del material de la distribución, el uso y su destino final como residuo.
Papel FSC
Es un papel cuyo certificado acredita que la madera con la que está hecho el producto que la posee proviene de bosques gestionados según los criterios del Forest Stewardship Council. Estos criterios incluyen entre otras cosas medidas de gestión sostenible del bosque en los aspectos ecológicos, sociales y económicos.
Valores y compromiso social
¿Qué significa ser una “imprenta sostenible”? Significa tener asumidos unos valores que rigen todas las actividades. El compromiso social y el respeto al medio ambiente son algunos de estos valores. Se trata de trabajar en el presente con visión de futuro; algo que las generaciones futuras sin duda agradecerán.
Fuente: Enpositivo